La súbita caída de los regímenes comunistas de la Europa del Este supuso para muchos un cambio radical y, a veces, de una injusticia sangrante. Buen ejemplo de ello son Emma y Böbe, dos maestras que impartían clases de ruso en Budapest y que, tras el fracaso del sistema socialista, se ven obligadas a reciclarse para subsistir. Mientras que una escoge la limpieza doméstica, la otra se dedicará a la prostitución.