En la quinta temporada, el matrimonio concertado de Philip y Elizabeth Jennings se vuelve más apasionado y genuino en medio de la escalada de la Guerra Fría. El incipiente romance de Paige con Matthew, el hijo de su vecino, el agente del FBI Stan Beeman, complica aún más las cosas, ya que Stan -el mejor amigo de Philip- sigue siendo la mayor amenaza para la seguridad de los Jennings.